Hay un especial enfado en estos sindicatos, incluidos los que dicen defender la enseñanza concertada, por lo sucedido en Llerena. Además de dos institutos hay un centro concertado, la cooperativa docente 'Nuestra Señora de la Granada-Santo Ángel', que ha salido indemne en la concentración de aulas y plantillas de enseñantes.
Un trato «desigual» entre centros que están sostenidos todos ellos con fondos públicos, critica la plataforma sindical. En este caso el centro concertado «ha quedado al margen de las soluciones», rechaza el secretario regional de enseñanza en CSI-CSIF.
Es todo un «atentado» contra la pública, atacan otros componentes de la plataforma sindical. «La concertada sólo debe llegar adonde no llega la pública».
Los sindicatos no quieren hacer de esto un enfrentamiento entre centros públicos y concertados pero «si hay problemas es para todos», exige Adrián Vivas. «Cuando haya vacas gordas que sean para todos, pública y concertada, pero cuando lleguen las flacas que sea también para todos». Si hay que cerrar aulas y sacrificar empleos que se reparta el esfuerzo.
Eva Pérez, Consejera de educación apunta que la fusión en Llerena y Castuera obedece al descenso de la natalidad, niega que haya habido favoritismo en beneficio del centro concertado. «¿Quién ha garantizado que no vaya a tener pérdida de alumnos el centro concertado? Nadie».
Los alumnos en él escolarizados tienen derecho según la LOE a seguir los estudios allí hasta que agoten la oferta disponible en el centro. «No se pueden suprimir unidades, pero si no hay una ratio de alumnos que garantice que permanezcan abiertas unidades de infantil, habrá que ir suprimiendo unidades; pero esto se hace en función de la demanda, y en todas las localidades».
Desde la Federación de Enseñanza de U.S.O. nos solidarizamos con los trabajadores que puedan ver peligrar sus puestos de trabajo. Con todos los compañeros, o es que los compañeros de la Cooperativa concertada no son trabajadores, ¿no tienen sus derechos? Esto supone un reto para los sindicatos convocantes, explicar a sus afiliados y simpatizantes por qué estiman que unos trabajadores son de primera y se lo merecen todo y otros son de segunda y se merecen menos.
Entendemos la obligación de la Consejería de ejercer una buena gestión de los recursos públicos.
Defendemos además la libertad de padres y alumnos a la libre elección de centro, amparada por la Ley, y que sin menoscabar los derechos de los trabajadores, puedan ejercer sus propios derechos en las mismas condiciones que los que optan por una enseñanza de titularidad pública.
Para nosotros es importante señalar que la Enseñanza concertada no es subsidiaria de la Enseñanza de titularidad pública, sino que garantiza la libertad de enseñanza para una parte de la población que económicamente no podría acceder a este tipo de educación si fuese privada sin concertar.
En cuanto a entrar o no en guerra, estimamos que no hay motivos para ello, la U.S.O. defiende y apoya sin restricciones a la Enseñanza Pública bien sea de titularidad privada o pública, puesto que se financia con nuestros impuestos y garantiza el acceso del pueblo a una educación que debe ser de la máxima calidad. Pero no dudaremos en defendernos de aquellos argumentos demagógicos que apuntan a que los males de la educación son debidos a la existencia de conciertos educativos. Lobos con piel de corderos que contaminan la opinión pública por egoístas motivos políticos, personales y partidistas de difícil justificación.
Desde la concertada no podemos estar más de acuerdos en compartir la vacas, flacas o gordas, siempre que no nos toquen las anoréxicas como ha sucedido hasta ahora.