03 Mayo
03 Mayo 2016 por FEUSO | Profesorado de religion - Madrid
Trabajo como profesor en un colegio maravilloso de un barrio estupendo del sur de Madrid, niños y niñas de la periferia de la Capital. Es la zona con mayor tasa de paro de la Comunidad de Madrid y la menor renta per cápita. Algunos niños están condicionados por situaciones que giran a su alrededor y que generan tristeza e inseguridad. Paro, familias desestructuradas, marginación… Ante esto, como cristiano en primer lugar y también como profesor de religión me pregunto cómo obrar, siempre he pensado en cómo creo que actuaría Jesús…Tranquilidad, comprensión, amor, solidaridad… Y así intento hacer...
El perfil de profesor/a de religión debe tener estos matices sin lugar a dudas. Ya Lorenzo Milani, sacerdote Italiano que iniciara la escuela de Barbiana con un pensamiento muy cercano al de San José de Calasanz, pensaba que en el niño debía fomentarse la comprensión y con ello la capacidad de reflexión… complicado en el actual mundo de Internet y los medios de comunicación… Por tanto si en la escuela todo se debe asimilar desde el razonamiento, la cordura y el entendimiento, en clase de religión aún más.
Puestos a dar un matiz a cada educador, el de nuestra asignatura debe ser persona que busque la problemática del menor para entenderla y si es posible ayudar en relación a nuestras posibilidades a resolverla. Amor, paz, solidaridad…Sí,es verdad, no somos trabajadores sociales pero ¿no es esencia del cristianismo la solidaridad, el amor a los demás y la comprensión?
En nuestras parroquias el espíritu de amor y ayuda al prójimo se palpa por todos los rincones, nosotros que educamos en la escuela no podemos ser menos. Por otro lado este afán nos da una gran ventaja con respecto a otras asignaturas donde puede primar más otras cosas.
Corren tiempos difíciles, por ello debemos hacer ver a todos, que la nuestra es una asignatura muy importante, puede que la que más, porque nosotros formamos personas, con sus valores y creencias, escuchamos, reflexionamos, pensamos, creemos y con todo, sin duda ayudamos a crear mejores seres humanos en primer lugar, pero también niños y niñas más seguros, más solidarios y más felices.
José Antonio Cruz.