02 Abril
02 Abril 2009 por FEUSO | Noticias
Al igual que en años anteriores, y coincidiendo con la celebración el 2 de abril del Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil, la editorial SM acaba de publicar el Anuario sobre el libro infantil y juvenil 2009, volumen que contiene una valiosa información sobre este sector en España y su desarrollo en el ámbito de América Latina.Como principal titular, y al igual que ha sucedido con la literatura de adultos, hay que resaltar que la crisis apenas ha afectado al sector de la literatura infantil y juvenil, que ha crecido en 2008 un 13,9% su volumen de ventas. La facturación total asciende a los 330 millones de euros (en los últimos cuatro años ha crecido un 21%, el doble del conjunto del sector). En total, se han editado 10.524 títulos y la tirada media es de 5.180 ejemplares (en los últimos años, ha descendido significativamente el número de títulos y ha aumentado la tirada media). La literatura infantil y juvenil es ya el 11% del total de la industria del libro.
Otro titular es el fracaso de las campañas de animación a la lectura entre los niños y jóvenes, que siguen sin conectar con los destinatarios de estas estrategias, pues todavía hoy el 45,4% no lee nunca o casi nunca ningún libro. Entre la población infantil, los más lectores ocupan la franja de los 10 a los 13 años.
También leen más las niñas que los niños. Entre los lectores frecuentes, el 43,2% son niñas y el 37,5% niños. El retrato del lector habitual entre los 14 y los 24 años es mujer, que vive en un ambiente urbano y que cursa o va a cursar estudios universitarios. Los porcentajes son similares a los de otros años.
A la hora de elegir un libro, la mayoría de los niños lo hacen por consejo de amigos, familiares o profesores. También ocupa un porcentaje importante los lectores que compran los libros de manera impulsiva. Un 10,7% adquieren los libros por influencia de Internet y un 16,1% -porcentaje parecido a los lectores adultos- compran los libros por las reseñas que han leído. Aunque en este asunto habrá que ver qué libros son los que directamente piden los niños y jóvenes y cuáles adquieren directamente los padres.
Por géneros, los preferidos son aventuras, intriga-misterio, fantasía y ciencia ficción. Las chicas prefieren las novelas de aventuras y románticas y los chicos la intriga/misterio y fantasía. Se incrementa el número de novelas que tienen como tema el realismo social y costumbrista.
EL FENÓMENO DEL BEST-SELLER
El tirón de los best-seller del género fantástico se ha mantenido en el 2008, a pesar de que los autores que han protagonizado el boom no han publicado este año. Sin embargo, los lectores siguen decantándose por este tipo de libros, que, además, “están ayudando a fomentar, extender y normalizar la lectura entre un público, a priori, poco lector”. Sobre el predominio de este género y su atractivo entre los lectores más jóvenes escribe Victoria Fernández: “El caso es que el género sigue gozando de gran aceptación entre un amplio abanico de lectores (doce a dieciocho años, e incluso adultos), alentado, sin duda, por los siempre mediáticos estrenos cinematográficos que se han sucedido a lo largo del año (Las crónicas de Narnia, Las crónicas de Spiderwick, La brújula dorada, la sexta entrega de Harry Potter, y más recientemente Crepúsculo), y, como es lógico, los editores han seguido alimentando ese mercado millonario con un amplio abanico de títulos que, sin perder de vista la magia y la brujería potterianas, incorporan nuevos elementos y perspectivas al género –vampiros, ciencia ficción, esoterismo, fenómenos paranormales, romanticismo, terror, humor- que, a la vista de los éxitos de ventas, están consiguiendo mantener vivo el interés de los lectores”.
Para los autores de este Anuario el “fenómeno best-seller” resulta positivo. En el Anuario se dice que los best-seller juveniles “son una literatura sencilla, accesible, amena, destinada a un consumo masivo pero que, sin embargo, se asocia mayoritariamente con una lectura de calidad”. Esta tendencia confirma que cada vez más la literatura infantil y juvenil imita las estrategias, tácticas y técnicas de la literatura de adultos.
Como en ediciones anteriores, el Anuario incluye estudios sobre la situación del sector en Cataluña, Galicia y el País Vasco. Y se analiza el desarrollo de la literatura infantil y juvenil en algunos países hispanoamericanos: Brasil, Chile y Colombia.
