23 Junio
23 Junio 2009 por FEUSO | Noticias
El 18 de junio se celebró en Málaga una Mesa Redonda, promovida por el Foro Malagueño de Educación, que bajo el lema “Por una educación de calidad en libertad” ha reunido a acreditados profesionales del mundo educativo. Uno de los ponentes ha sido el secretario general de la Federación de Enseñanza de USO-Andalucía, Joaquín Aráuz.
En su intervención, Joaquín Aráuz ha expuesto la posición crítica de FEUSO respecto a la educación andaluza, en el marco propuesto (calidad y libertad). Las ideas-fuerza de su intervención, respecto a la defensa y recuperación de la calidad educativa han sido las siguientes:
Diversos indicadores PISA y los propios datos del Ministerio de Educación sitúan a Andalucía en los últimos lugares en cuanto a fracaso y abandono escolar. Es urgente investigar sin apriorismos, dogmas, ni demagogias acerca de nuevos modelos de escuela para superar esta grave situación. Para la USO es urgente recuperar la valoración social del papel del profesorado y su autoridad moral y real, así como volver a establecer la denominada “cultura del esfuerzo” y recuperar entre el alumnado valores que han sido desacreditados, como el sacrificio, la disciplina, el propio esfuerzo, la superación personal, etc.
Es insoportable –además de irracional- que cada nuevo gobierno traiga “sus propias leyes educativas”. Resulta imprescindible lograr un Pacto Social por la Educación, en el que intervengan no solo los partidos políticos, sino –fundamentalmente- el resto de las organizaciones sociales: de padres y madres, de alumnos, sindicatos y patronales de la enseñanza, etc.
Lo más inútil es el inmovilismo, el conservadurismo ideológico y el miedo a innovar y a experimentar. ¿Se teme, acaso, que los posibles resultados de investigaciones científicas puedan contradecir o poner en evidencia algunos dogmas educativos, fracasados y superados en otros países de nuestro entorno cultural?
Respecto al concepto de libertad educativa, Joaquín Aráuz ha defendido la libertad constitucional de padres y madres para optar por diferentes modelos educativos, sean diferenciados, mixtos u otros. En este sentido, y en referencia expresa a la Educación Diferenciada (E.D.), ha manifestado que USO rechaza cualquier forma de discriminación y marginación a cualquier persona por razón de sexo, edad, raza, ideología, condición social o económica, etc., porque atentaría contra los principios más elementales de la convivencia democrática; además de ser un delito. Para USO, la E.D. es una opción pedagógica igual de válida que la coeducación. Cualquiera de estas opciones debe quedar salvaguardada por el respeto a la autonomía de los centros, la protección de su identidad y su carácter propio. Para la USO ambos modelos, la coeducación y la E.D. son compatibles y viables en el actual marco jurídico español y europeo. No son opciones contrapuestas; ni siquiera complementarias, simplemente son opciones distintas. Por otra parte, creemos que ninguna de estas opciones es la panacea del fracaso educativo; no sirven para todo ni para todos.
En la USO hablamos de EDUCACIÓN DIFERENCIADA. Pero los detractores de esta opción hablan de EDUCACIÓN SEGREGADA, término que tiene una connotación peyorativa, vinculada a la discriminación y marginación de la mujer. Es éste el principal argumento para su oposición; argumento ciertamente falaz. Para la USO, la opción de la E.D. no debe convertirse en una batalla ideológica o política (como ocurre actualmente en Andalucía y otras CC.AA. de España), sino que debe enfocarse como un derecho de elección pedagógica de los padres y madres. Es una cuestión de libertad y de justicia social.
El siguiente dato es muy revelador: en EE.UU., últimamente se han venido fomentando las escuelas públicas de educación diferenciada. En 2002, con George Bush, había 11 centros públicos de este tipo; en la actualidad, con Barak Obama, hay 540. ¡No se trata de imponer dogmatismos ideológicos, sino de aplicar soluciones eficaces, con imaginación, en libertad y sin prejuicios!
Por último, el secretario general de FEUSO-Andalucía manifestó que “haciendo lo de siempre, obtendremos los mismos resultados de siempre. Es imprescindible investigar y experimentar y no limitarse exclusivamente a los modelos clásicos de E.D. y de coeducación. Para vencer el fracaso escolar, se precisan esfuerzos rigurosos, atrevidos, serios e imaginativos.
