13 Junio
13 Junio 2011 por FEUSO | Noticias
“El profesorado, clave para una educación de calidad” es el nuevo documento elaborado por Foro “Calidad y Libertad de la Enseñanza”, del que forma parte, entre otros representantes y expertos de la comunidad educativa, Antonio Amate, secretario general de FEUSO. Este documento se presentó el 9 de junio en Madrid y contó con la asistencia de una representación de la Federación de Enseñanza de USO.
El Documento fue presentado por Javier Valle López, vicedecano de Ordenación Académica y Desarrollo de las Titulaciones de la Universidad Autónoma de Madrid; Juan Velarde Fuentes, presidente del Foro Calidad y Libertad de la Enseñanza; Juan Antonio Ojeda Ortiz, secretario general de Escuelas Católicas (FERE-CECA y EyG); y Ángel Miranda Regojo, relator del documento.
Este nuevo documento de Foro, elaborado con el rigor acostumbrado, aborda desde diferentes perspectivas el importante papel que desempeña el profesorado en cualquier proceso de aprendizaje. En un momento de implantación, a veces errática en la educación, de las Nuevas Tecnologías, conviene resaltar este papel para que cualquier política educativa no se olvide de uno de los principales protagonistas, pues se da el caso de que ya hay quien considera al profesor como un mero elemento decorativo en las aulas más que como el principal actor. El documento, que recoge mucha información de estudios internacionales como PISA, Mackinsey y Talis, adelanta ya en sus primeras líneas su conclusión: con palabras tomadas del Informe Mackinsey, “la calidad de un sistema educativo no podrá ser mayor que la calidad de sus docentes”.
Son muchos los temas que aborda este documento, que puede proporcionar a profesores y directivos muchas pistas para mejorar su trabajo docente y, también, para reforzar todo lo relacionado con su formación, uno de los puntos que más se destacan en este documento, incidiendo en que los centros educativos deberían nutrirse de profesores bien preparados y seleccionados. Con este nuevo trabajo, el décimo elaborado por Foro, pretende contribuir también a que se tomen medidas para mejorar el reconocimiento social del profesorado, otro de esos puntos que tienen que abordarse necesariamente si lo que se desea es mejorar la calidad de nuestro sistema educativo. Analizando el contexto económico, social y educativo actual resulta, sin embargo, sorprendente la facilidad con la que las Administraciones públicas de todos los niveles y de todos los signos políticos han aplicado a la mínima de cambio importantes recortes económicos tanto a los salarios de los docentes como a aquellas partidas destinadas a la educación. Es, por ello, poco creíble el discurso “oficial” de aquellos que repiten que la educación es el instrumento más valioso para salir de la crisis y, a la vez, recortan sin pudor los presupuestos destinados a la educación y a sus protagonistas, los docentes.
El documento analiza desde diferentes perspectivas la situación actual del profesorado, comparándola las Comunidades Autónomas y también en relación con Europa. En este análisis, se apuesta decididamente como una de las vías de trabajo la necesidad de mejorar el rigor de la formación inicial del profesorado, “velando –como se dice en el Documento- porque el practicum favorezca la máxima rentabilidad de la experiencia del profesorado en ejercicio”. A todo ello, sigue el Documento, debe unirse la “urgente” necesidad de negociar el Estatuto del Funcionario Docente
Son muchos los aspectos de este Documento que analizan directamente el trabajo que realizan los docentes. En el capítulo de conclusiones, Foro propone los siguientes puntos que pueden revisarse y trabajarse más en los próximos años:
• Estimular en las nuevas generaciones la opción por la misión y vocación docente.
• Hacer posible una formación competencial de nuestro profesorado abierta a la generación y gestión del conocimiento y a la mejora de calidad educativa de los centros.
• Impulsar ámbitos de verdadera reforma en la articulación entre la teoría y la práctica de la carrera docente de nuestros futuros profesores o del profesorado novel.
• Comprometer a fondo, incluso con estímulos económicos adecuados, a los centros donde los futuros profesores realizan sus prácticas, de cara a la planificación, acompañamiento, desarrollo y evaluación de las mismas.
• Seleccionar, preparar y reconocer con ventajas laborales a los tutores-mentores que acompañan las prácticas en los centros.
• Fomentar la creación y el dinamismo de redes de cooperación a la mejora de la formación y de la imagen social de los docentes con la participación de las Administraciones educativas, las universidades, los centros educativos y las diferentes fuerzas sociales.
• Aprovechar las enormes posibilidades y ventajas tecnológicas para crear redes virtuales y plataformas digitales que sean puntos de encuentro entre los centros de formación y los centros de prácticas, generadores de una comunidad virtual de aprendizaje.
