16 Junio
16 Junio 2008 por FEUSO | Copia de Madrid
Como Federación de Enseñanza de USO-Madrid, nos dirigimos a vosotros al tener conocimiento de la carta dirigida por ANPE-Madrid a la Consejera de Educación en la que, tras mostrar su preocupación por la situación de la enseñanza publica en Madrid, concluye como única solución solicitando “deje sin efecto los conciertos para el próximo curso y modifique o suspenda la ley de conciertos con la enseñanza privada”.Desde la Federación de Enseñanza de USO-Madrid, no entendemos como un sindicato, sea cuál sea su ámbito de actuación, realiza una petición que de llevarse a efecto pondría en peligro la continuidad de las condiciones de trabajo de miles de profesionales, que están prestando un servicio a la sociedad madrileña contribuyendo con su trabajo a la formación de nuestros jóvenes.
Los problemas que padece la enseñanza pública de nuestra Comunidad, no son distintos de los que padece nuestro sistema en su conjunto, más aún, son fruto de una legislación que adolece, entre otros, de medios eficaces para potenciar el respeto y la disciplina en las aulas, para reforzar la autoridad de los docentes en el aula y un correcto ejercicio de la función directiva.
Sólo desde un análisis real de los problemas se puede realizar un diagnóstico correcto y proponer medidas para solucionarlos. Mientras que los que se dicen “defensores de la enseñanza publica” sólo se les ocurra para mejorarla atacar a los centros privados concertados, como si ellos y sus trabajadores fuesen los responsables de sus males, nunca conseguirán mejorar y prestigiar la escuela pública; en todo caso, con estos ataques sólo hacen una mala propaganda de la red pública quejándose de los males, pero sin hacer nada efectivo dentro de ella para mejorarla.
La formulación de los conciertos educativos es consecuencia del mandato constitucional que, en su artículo 27.5, establece que “los poderes públicos garantizan el derecho de todos a la educación, mediante una programación de la enseñanza, con participación efectiva de todos los sectores afectados y la creación de centros docentes”. Para continuar respectivamente en sus apartados 4 y 9 diciendo que “La enseñanza básica es obligatoria y gratuita” y que “Los poderes públicos ayudarán a los centros docentes que reúnan los requisitos que la ley establezca”.
Para que cualquier familia pueda educar a sus hijos es obligación de las Administraciones educativas facilitarles los medios para poder hacerlo en libertad y, por tanto, dotar a los centros privados de la financiación necesaria (concierto educativo) para hacer accesible este derecho en igualdad de condiciones a todos los ciudadanos que deseen que sus hijos se escolaricen y eduquen en otros centros distintos de los que la propia Administración crea.
También en su apartado 2 este articulo nos dice que “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales”. Entre los principios democráticos de convivencia podríamos pensar que se encuentra el de la convivencia pacífica y complementaria del conjunto de centros que constituyen la red de centros sostenidos con fondos públicos y, entre las libertades fundamentales está la que establece este mismo artículo 27 en su apartado 1: “Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza”
El ejercicio, por tanto, de este derecho constitucional se ha recogido en Leyes Orgánicas: LODE, LOGSE y la más reciente LOE, mediante la fórmula del concierto educativo, similar a la existente en otros países europeos como Bélgica y Holanda. El pacto constitucional que propició el artículo 27 de nuestra Carta Magna, no distingue entre centros públicos o privados, sino que incide en lo realmente importante: el derecho de todos a la educación.
Es nuestra obligación y, en eso está nuestro empeño, el conseguir una educación de calidad para todos y en todos los centros donde libremente se escolaricen los alumnos. Sólo desde los parámetros de libertad y equidad podremos avanzar en la calidad que nuestro sistema educativo necesita y el alumnado y sus familias demandan.
En este objetivo está la Federación de Enseñanza de USO-Madrid y, hacemos un llamamiento a formar parte de este proyecto a todos los que quieran trabajar por conseguir una educación de calidad para todos, en todos los centros, sin exclusiones, que sólo será posible si se hace en libertad y desde la libertad.
Un cordial saludo
Mª Concepción Iniesta García
Secretaria General de la Federación de Enseñanza de USO-Madrid