07 Junio
07 Junio 2016 por FEUSO | Atención a la discapacidad
ADEMO es una entidad para personas con discapacidad intelectual, concertada con la Comunidad de Madrid. Comprende Atención Temprana, Educación Especial, Centros Ocupacionales y Viviendas Tuteladas. En las elecciones de febrero de 2012, USO consiguió 4 de los 9 delegados miembros del Comité de Empresa.
Desde entonces, desde FEUSO hemos trabajado en conjunto con nuestros delegados del Comité para ayudar a los trabajadores en todos sus problemas laborales. Y el excelente trabajo de los miembros de USO en el Comité de Empresa ha dado resultado: en las últimas elecciones, USO ha conseguido la mayoría absoluta con 5 delegados (UGT, 3, y STEM, 1). Hemos hablado con Yolanda Jáuregui, Ana Robles e Isabel Murillo, miembros del Comité de Empresa de la lista de USO.
¿Por qué os presentasteis por USO a las Elecciones sindicales de ADEMO?
En principio, no nos convencían ni UGT ni Comisiones porque, aunque son estos sindicatos los que firman el Convenio, en las últimas ocasiones no hemos visto que realmente miraran por los trabajadores. Así que en optamos por un sindicato independiente, y elegimos USO porque un padre de uno de nuestros alumnos nos puso en contacto con ellos, y así empezó todo.
¿Cómo transcurrió el proceso electoral?
Muy tranquilo ya que no existe rivalidad entre nosotros. Somos todos compañeros y tenemos claro que en un sindicato o en otro nuestra función es intentar mejorar las condiciones de los profesionales con los que trabajamos y mantenerlos informados sobre sus derechos.
¿Cuáles son los objetivos que se propone conseguir el nuevo Comité de Empresa?
Nuestros objetivos son muy sencillos y claros: solo intentamos ayudar a nuestros compañeros y poner nuestro granito de arena para mejorar las condiciones laborales de nuestro sector. También intentamos dar voz a un colectivo como el nuestro, al que se escucha poco.
¿Por qué pensáis es muy importante la representación sindical en un centro de Educación Especial?
Necesitamos que se nos escuche más. Cada vez que hay que firmar un nuevo Convenio, nos echamos a temblar porque las condiciones van a peor, al contrario de lo que debería ser. Los Convenios, pensamos, deberían mejorar la situación de los trabajadores y no se debería permitir que se eliminaran acuerdos beneficiosos que han sido firmados con anterioridad; ni, tampoco, las diferencias que existen entre trabajadores de la misma categoría en sueldo y horas de trabajo solo por entrar unos años más tarde a trabajar.