07 Noviembre
07 Noviembre 2019 por FEUSO | Enseñanza concertada
Ante la nueva convocatoria de huelga realizada por cuatro de los sindicatos mayoritarios del sector, desde la Federación de Enseñanza de LSB-USO queremos manifestar que, como ya hemos reiterado en varias ocasiones, es inadmisible que llevemos diez años sin acordar un nuevo Convenio Colectivo que regule la relaciones laborales y derechos de los trabajadores de la Enseñanza Concertada en el País Vasco. Creemos que exige por ambos interlocutores una profunda reflexión sobre las razones por las que no se ve cerca un acuerdo, cuando en otras redes educativas concertadas se han alcanzado de una manera rápida y nada conflictiva.
Como otros agentes sociales, en especial las AMPAs, desde USO también hacemos un nuevo llamamiento a las partes, Kristau Eskola y sindicatos mayoritarios, a que afronten una negociación sincera, olvidando posturas extremas y pensando en la viabilidad de la escuela concertada, en las condiciones laborales de los trabajadores, en el mantenimiento de los puestos de trabajo y en dar el mejor servicio posible, aportando la singularidad del proyecto educativo de nuestras escuelas, y para poder garantizar la libertad de elección del tipo de educación de las familias.
Emplazamos al Gobierno Vasco a que dé un paso más y asuma su responsabilidad. Es el mayor responsable de la financiación de las condiciones salariales de los trabajadores. Debe velar por aportar una financiación adecuada y sostenible para la escuela concertada, a la que acuden la mitad de los alumnos vascos. Y ante la grave disminución de niños en nuestra comunidad, debe replantearse el ratio de alumnos por aula, para mejorar la calidad educativa y garantizar los puestos de trabajo.
Emplazamos a las partes, Kristau Eskola y sindicatos mayoritarios, a aceptar una verdadera mediación por parte del Consejo de Relaciones Laborales. Seguir negociando hasta que se consiga llegar a un acuerdo, y desbloquear de una vez por todas la situación, sin caer en la trampa fácil de echar toda la culpa a la otra parte.
Desde USO queremos mostrar nuestra solidaridad con los alumnos y sus familias. Entendemos la sensación de indefensión a la que se enfrentan. Entendemos que ello es una grave amenaza para el futuro de nuestros centros educativos, como ya venimos observando, y que algunos no están teniendo en cuenta.
Valoramos esta convocatoria como desproporcionada; que perjudica a los trabajadores, con tantas jornadas perdidas; y vemos también que el ambiente y las relaciones en los colegios se están viendo gravemente afectados.
Observamos, además, cómo otros sindicatos minoritarios (UGT) han decidido no seguir convocando paros y han decidido tener una voz distinta, similar a la que estamos manifestando desde USO y hacerla pública.
Somos muchos los trabajadores que asistimos con preocupación y desazón a este espectáculo, que debe terminar por nuestro bien y el de toda la comunidad educativa.
Desde USO, planteamos otra manera de negociar más proclive a llegar acuerdos, frente a las posiciones extremas actuales.
Por todo ello, en USO proponemos no secundar esta convocatoria de huelga, que entendemos abusiva e interesada, sino insistir en que se lleve a cabo una verdadera negociación realista y honesta, hasta que se pueda alcanzar un acuerdo sobre el nuevo convenio.
Siempre respetaremos la libertad de cada trabajador para tomar su decisión de secundar o no los paros.
Sí a un nuevo convenio con mejoras de las condiciones laborales. No pongamos en peligro nuestros puestos de trabajo y modelo de escuela. El futuro de nuestros colegios depende de todos.