03 Julio
03 Julio 2020 por FEUSO | Enseñanza concertada
Es inaplazable un acuerdo educativo en España que una las voluntades de toda la comunidad educativa en una única dirección, que supere las actuales dificultades, que son muy graves, y que contribuya a la reconstrucción y mejora del país a medio y largo plazo. Para ello, USO piensa en plural, asume la diversidad y propone desde la multiplicidad de realidades que conforman la educación en España. Ahora no es el momento de hacer distinciones, ni de regar las diferencias. Toca arrimar el hombro todos juntos.
Recibimos con decepción el borrador promovido desde el Gobierno en materia educativa para la Comisión de la Reconstrucción Social y Económica. Parece un calco de las arcaicas propuestas de algunos lobbies de la izquierda española más involucionista. La sociedad española, hoy en día, es más abierta, más tolerante y plural que nunca. Pero insisten machaconamente en imponer desde arriba la monotonía de un sistema educativo donde las escuelas públicas acaparen los recursos públicos y las escuelas concertadas se opriman a un papel subordinado, en contra del consenso original del artículo 27 de la Constitución y a pesar de la importante demanda social que las sustenta.
Es inadmisible aprovechar la profunda crisis originada por la pandemia de Covid-19 para progresar en las agendas ideológicas que dividen a los ciudadanos, cuando la única idea que debería motivar una acción política solidaria en estos momentos es el pragmatismo. Resolver los problemas de la gente. Fomentar lo que funciona y mejorarlo. No cambiar nuestro modelo educativo en tiempos de fatalidad, pidiendo la unidad de todos y actuando al mismo tiempo en beneficio de una parte.
No nos sorprende el sesgo ideológico de esta propuesta educativa del Gobierno, pues está presente en todas las medidas que propone la actual LOMLOE, la enésima reforma educativa que padecemos en nuestro sistema educativo, a pesar de que desde USO hemos advertido de los agravios que crea contra las libertades de los ciudadanos y, además, de la inoportunidad de su tramitación parlamentaria en plena pandemia.
Estamos a tiempo de elevar el listón de la política en España. De mejorar la calidad de nuestra vida política y de nuestra convivencia democrática. Tan sólo hace falta querer. Obras son amores y no buenas razones. Basta ya de declaraciones, de emitir mensajes tranquilizadores como los que repite la ministra Celaá continuamente cuando se le acusa de atacar a la enseñanza concertada con su Proyecto de Ley: “Las familias no tienen nada que temer” Entonces, ¿por qué la totalidad del incremento de la inversión de los 2.000 millones de euros prevista irá destinada a la educación pública de gestión directa? Además de dejarla sin fondos, también buscan –no hay más que leer la LOMLOE- dejarla sin puestos escolares. También a los centros de Educación Especial. El algodón no engaña.
La Federación de Enseñanza de USO pide a todas las fuerzas políticas presentes en la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica una lectura atenta de la realidad educativa de nuestro país basada en la complementariedad de las redes educativas pública y concertada. Ese debe ser el punto de partida y de llegada. Perfeccionar lo que funciona. Progresar desde los actuales equilibrios hacia una realidad mejor para todos en un esfuerzo compartido por todos.
Federación de Enseñanza de USO
Madrid, 1 julio 2020