02 Octubre
02 Octubre 2012 por FEUSO | Profesorado de religión
El Ministerio de Educación presentó el pasado 21 de septiembre el Anteproyecto de Ley Orgánica para la mejora de la Calidad de la Educación (LOMCE). FEUSO ha hecho una valoración del Anteproyecto subrayando la necesidad de introducir cambios en nuestro sistema educativo para rebajar los altos índices de fracaso y abandono escolar. Ahora se abre un periodo de negociación en el que FEUSO trasladará al Ministerio de Educación sus propuestas y reivindicaciones. En concreto, una de las cuestiones que FEUSO planteará tiene que ver con la asignatura de Religión.
En primer lugar, en consonancia con lo aprobado por FEUSO en su VI Congreso Estatal, celebrado el pasado mes de mayo, es esencial que, “en cumplimiento de mandato constitucional, los padres puedan elegir en la escuela pública la asignatura de Religión para sus hijos y en pie de igualdad con las demás materias, de modo que no queden en desventaja por esta opción libre. Esto no puede significar discriminación para ningún alumno, por lo que debe ser una asignatura en igualdad de condiciones que el resto”. Para ello, debe mejorarse la regulación relacionada con la asignatura de Religión y su alternativa.
En este sentido, la llamada Atención Educativa supone, en la práctica, como FEUSO ha denunciado en repetidas ocasiones, una flagrante pérdida de tiempo, cuando no una estrategia de aquellos que no quieren que la asignatura de Religión se imparta en los centros públicos para descafeinarla y desprestigiarla. En una Resolución Especial aprobada por el VI Congreso de FEUSO proponíamos la supresión de la Atención Educativa con el fin de que se introdujese una asignatura alternativa a la Religión en el sistema educativo. Y lo explicábamos desde la experiencia aportada por este profesorado: “Los alumnos que cursan la asignatura de Religión están adquiriendo competencias derivadas de la materia elegida, aprendiendo historia, mejorando lectura, lengua, geografía, contenidos sobre las tradiciones y culturas, etc. La Atención Educativa que reciben los alumnos que no eligen Religión no es ninguna asignatura y no supone una materia curricular, llegando en muchos casos a ser un tiempo perdido de un número importante de horas a lo largo de toda la escolaridad, en las que simplemente se está jugando, pintando, viendo vídeos o, en el Bachillerato, ni siquiera se asiste a clase”.
En segundo lugar, deben mejorarse las condiciones laborales del profesorado que imparte esta asignatura, algo que FEUSO viene reclamando desde hace muchos años. Ha llegado el momento de que sus condiciones laborales sean las mismas que las del resto de los profesores que imparten clase en los centros públicos, reconociendo el complemento por antigüedad y por tutoría y coordinación, el abono de itinerancias y desplazamientos, etc. En definitiva, el profesorado de Religión debe ser miembro de pleno derecho de los claustros a los que pertenece.
FEUSO hará llegar estas reivindicaciones al Ministerio con el fin, también, de que se prestigie una asignatura que, como las demás, contribuye a construir una sociedad más humana y solidaria.