13 Febrero
13 Febrero 2009 por FEUSO | Profesorado de religión
Representantes de los profesores de Religión de FEUSO de la mayoría de las Comunidades Autónomas se reunieron el 12 de febrero, en Madrid, para analizar la situación laboral y profesional en la que se encuentra el colectivo de los docentes de Religión.En primer lugar, se valoró las consecuencias de la reciente sentencia del Tribunal Supremo que dio respuesta así al recurso que cuestionaba la presencia de la asignatura de Religión en el currículum escolar. La sentencia confirma lo que siempre ha defendido FEUSO: la legalidad y legitimidad de la presencia de la Religión en las aulas y la dignidad del profesorado que la imparte. Aunque se trata de una enésima sentencia, no parece que ni el Ministerio de Educación ni algunas Comunidades Autónomas se den por enteradas, pues los decretos emitidos sobre la ESO y el Bachillerato en los últimos meses evidencian una voluntad política de reducir al absurdo la asignatura de Religión en el conjunto del sistema escolar y, por extensión, doblegar al profesorado que la imparte.
Los representantes de FEUSO analizaron detalladamente la situación de la asignatura de Religión y de los docentes en las diferentes Comunidades Autónomas y las acciones legales emprendidas en algunas de ellas para conseguir que los profesores de Religión perciban sus justas remuneraciones. Respecto a la negociación colectiva y la representación ante las Administraciones educativas del colectivo de los profesores de Religión, las situaciones que se dan son muy diversas y habrá que emplear diferentes estrategias según la Comunidad Autónoma.
Los representantes de FEUSO quieren transmitir a sus delegados, afiliados simpatizantes que seguirán trabajando por la mejora de sus condiciones laborales y sociales de los profesores de Religión y para que su labor docente tenga la misma consideración personal y profesional que cualquier otro profesor que desarrolla su tarea docente y educativa en cualquier centro público. A la vez, seguirán defendiendo, como así ha hecho la reciente sentencia del Tribunal Supremo, la inclusión de la enseñanza de la Religión en los centros de enseñanza en condiciones equiparables a las demás asignaturas.